La problemática del diésel se acentúa en las provincias y crece la desesperación entre los productores
Dos cisternas fueron retenidas por pobladores en el municipio paceño de Caranavi. Durante la semana, se tomaron trancas en el Norte Integrado cruceño y crece la presión hacia el Gobierno, que puso un plazo para normalizar la distribución de carburantes
Si bien desde Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) se indica que hay una ‘disminución’ en las filas de los surtidores en las ciudades, la situación en las provincias es otra, donde se han registrado diferentes episodios, incluso violentos, debido a la fallas en el abastecimiento, principalmente de diésel.
Esta situación se da en medio del ultimátum que han dado diferentes sectores al Gobierno nacional para resolver esta situación, como es el caso de algunas esferas del transporte o incluso organizaciones sociales como los Ponchos Rojos, que dieron plazo hasta el lunes para que se dé una respuesta clara.
Mientras tanto, el Gobierno nacional se puso un plazo de 10 días, es decir, hasta el 31 de marzo para la normalización en el abastecimiento tanto de gasolina como de diésel a escala nacional, tras una reunión que se dio con la confederación Sindical de Choferes de Bolivia.
Polémica en Caranavi
El episodio más reciente registrado en provincias y zonas rurales se dio en Caranavi, donde pobladores retuvieron dos cisternas que estaban con combustible y que habían sido retenidas por las fuerzas del orden debido a que los conductores no portaban licencia de conducir, ni la documentación que acredite el traslado del combustible, según el reporte.
Al respecto, el comandante de la Policía en La Paz, Gunther Agudo, señaló que las cisternas ya no se encontraban en la plaza donde estaban siendo custodiadas por uniformados y ahora ha iniciado las investigaciones para dar con los vehículos y con las personas que las sacaron del lugar.
Este mismo viernes, el alcalde de Caranavi, Eustaquio Huiza, señaló que la situación en este municipio es crítica por la falta de combustible, teme agresiones a autoridades, por lo que ha solicitado mayor presencia policial.
MIRA AQUÍ: ANH: Cisternas detenidas en Caranavi apagaron su GPS tras entrega de combustible en ciudad
Más hechos inusuales
En la localidad de San Germán, en el municipio cruceño de Yapacaní, los pobladores instalaron un puesto de control en la ruta que conecta hacia la zona del trópico de Cochabamba para evitar la “fuga” de combustible del departamento cruceño, pidiendo a los conductores mostrar sus maleteros para verificar si trasladaban bidones cargados.
En la misma zona, pero ya en la jurisdicción de Cochabamba, pobladores de Ivirgarzama llegaron hasta un retén donde se cobra peaje, donde ocasionaron destrozos e hicieron huir a los trabajadores, exigiendo el abastecimiento de combustible.
Asimismo, en el Norte Integrado cruceño los productores también salieron a las carreteras y, si bien no ocasionaron destrozos, también liberaron los puestos de peaje alegando que el Gobierno sigue recaudando, pero sin dar una respuesta a las demandas sectoriales.
MIRA AQUÍ: Pobladores de San Germán instalan puesto de control para evitar “fuga” de combustible
Afectación al sector productivo
En los Valles cruceños la situación se tornó insostenible para el sector productivo, donde se conformó en Comité de Defensa debido a la situación de desasbatecimeinto, tema que no solo impide recoger el alimento –principalmente verduras y hortalizas-, sino también trasladarlo a los centros de abastecimiento de diferentes regiones.
Por su parte, la dirigencia de la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) reflejó que hay desesperación sectorial debido a que no hay condiciones para encarar la cosecha de granos estratégicos como soya, maíz y sorgo.
Según Anapo, desde noviembre del año pasado, los 14.000 agricultores asociados a la institución han enfrentado dificultades para acceder a combustibles a tiempo, lo que generó un aumento en los costos de producción y disminuyó la competitividad del sector agrícola boliviano.