“El déficit fiscal global ha superado los $us 5.500 MM, la cifra histórica más alta”, señala exdirector del BCB
El exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB) José Gabriel Espinoza afirmó que “este déficit ha superado el 12%, muy similar a lo observado durante el 2020, cuando había pandemia”.
En una publicación en sus cuentas de redes sociales, el exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB) José Gabriel Espinoza señaló que “el déficit fiscal global” del país “ha superado los $us 5.500 millones”, la “cifra histórica más alta”.
El experto indicó que “el Ministerio de Economía también anda retrasando o escondiendo datos”.
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Este medio busca una respuesta sobre este tema con los personeros de esta cartera del Estado.
Espinoza indicó que “en particular, el dato del déficit fiscal a finales del 2023 no ha sido publicado aún”.
“Sin embargo, al contar ya con los datos del PIB, los datos de deuda externa y el total del financiamiento interno tanto del BCB como el que proviene del sector privado, es posible reconstruir las cifras del déficit fiscal (muy a pesar del MEFP)”, escribió.
El experto indicó que con base en esas cifras se establece que “el dato es preocupante: el déficit fiscal global ha superado los $us 5.500 MM, lo que constituye la cifra histórica más alta, cerrando también una década continua de déficits fiscales”.
En términos del Producto Interno Bruto (PIB), “este déficit ha superado el 12%, muy similar a lo observado durante el 2020 (cuando había pandemia, había caído la recaudación impositiva y se tenían muchos gastos extraordinarios)”, señaló Espinoza.
“Pero lo grave no es eso, es la cifra en términos nominales, ya que el déficit fiscal del 2023 ha superado al del 2020 en más de $us 840 MM”, señaló.
En su criterio, “ese extraordinario déficit fiscal ha sido financiado, en un 75% por créditos del BCB, algo más del 20% por deuda interna contraída con privados (principalmente proveniente de los fondos de pensiones) y en menos del 5% con deuda externa neta (desembolsos menos servicio de deuda)”.
“Algo más para asustarse”, advirtió y acto seguido afirmó que “dada la baja ejecución de la inversión pública, ese déficit, muy probablemente, es en su mayoría déficit corriente”.
Aclaró que “significa que los ingresos recurrentes del Gobierno no alcanzan para cubrir sus gastos recurrentes, algo que señalaría la pésima administración de la cosa pública”.
