Mujer de 154 kilos mata a su hijo adoptivo tras sentarse sobre él como castigo
Un video de una cámara de seguridad registró el momento cuando la mujer se sentó sobre el pequeño de 10 años. Llegó un momento que la madre llegó a pensar que el niño estaba fingiendo
En un trágico caso que ha conmocionado a Estados Unidos, una mujer de 154 kilos fue arrestada tras haber causado la muerte de su hijo adoptivo, de tan solo 10 años, al sentarse sobre él como castigo. Según documentos judiciales, el niño falleció dos días después en el hospital debido a asfixia mecánica. La mujer ha sido sentenciada.
El incidente ocurrió en abril, cuando la mujer, identificada como Jennifer Lee Wilson, de 48 años, intentó inmovilizar al pequeño Dakota Levi Stevens, quien había intentado escapar a la casa de un vecino.
Wilson, según su declaración, eligió sentarse sobre el niño en un aparente intento de “controlar su comportamiento”. Sin embargo, incluso después de que el niño dejó de moverse, ella continuó presionándolo con su cuerpo.
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Un video de una cámara de timbre captó el momento en que Wilson se encontraba sobre el niño, un hecho que está siendo utilizado como evidencia en el caso.
Según el testimonio de un testigo, Wilson llegó a cuestionar si el niño estaba “fingiendo” estar inconsciente antes de notar que sus párpados lucían pálidos.
Cuando finalmente llegó la policía, Dakota ya no respiraba y no tenía pulso. Fue trasladado de emergencia en helicóptero a un hospital en South Bend, donde murió dos días después. La autopsia confirmó que la causa de muerte fue asfixia.
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Antes del fatídico episodio, el pequeño Dakota ya había manifestado su deseo de ser adoptado por un vecino, alegando que sus padres adoptivos le pegaban en la cara. A pesar de estas declaraciones, las autoridades no habían intervenido hasta el lamentable desenlace.
La mujer enfrenta cargos por homicidio imprudente, por lo que fue condenada a seis años de prisión. Además, su licencia como madre de acogida ya había sido revocada, lo que indica que no tenía autorización para cuidar niños en el momento del incidente.
El caso ha despertado una fuerte indignación y renovó el debate sobre los controles y medidas en el sistema de cuidado de crianza en los Estados Unidos.
