Cruceño de Oro: Carlos Eduardo Castrillo, una vida dedicada al compromiso con los animales
Carlos Eduardo llevaba años al cuidado de animales en cautiverio y al rescate de especies silvestres que pasaban dificultades como en los incendios. Hoy sus allegados honran su memoria
Biólogo de profesión, amante de la naturaleza y de los animales silvestres. Así recuerdan sus amigos y familiares a Carlos Eduardo Castrillo, un ‘Cruceño de Oro’ que perdió la vida en días pasados por el ataque de un jaguar y, pese a esta circunstancia, su recuerdo queda latente, al igual que su entrega por la labor que desempeñaba a diario.
Carlitos, como le decían en su familia, destacaba por su espíritu de ayuda y su compromiso con el trabajo, fue cumpliendo su faena que un hecho desafortunado le impidió seguir con su sueño de seguir ayudando a los animales.
Este joven profesional llevaba años al cuidado de animales en cautiverio y al rescate de especies silvestres que pasaban dificultades como en los incendios.
“Destacó por ser un ser muy sensible. Lo cual dio alma, vida y corazón, siguiendo ese trabajo”, recuerda Vivían Castrillo, tía del joven.
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Abrahan Rojas, colega biólogo de Carlos Eduardo, también recuerda la pasión, las ganas y el desprendimiento que tenía este joven por cuidar a los animales, a pesar de que muchas veces no se contaba con el apoyo o la infraestructura para sacar a adelante a los animales.
“Era un hombre sin malicia, siempre fue fiel, amable y ha sido una de las pocas personas que podría llegar a conocer que en ningún momento ha demostrado nada que no sea bondad hacia alguien”, señala Mauricio Fernández, uno de sus amigos.
Lamentablemente, partió de este mundo muy joven por el ataque de un jaguar. Sin embargo, su vocación lo destacó entre los demás y deja un gran vacío entre los que lo conocían.
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