Masacre y estruendo militar: Se cumplen 44 años del golpe de Estado de García Meza

A punta de balas, los golpistas asaltaron la Central Obrera Boliviana (COB), se llevaron a Marcelo Quiroga Santa Cruz y nunca más se lo volvió a ver, hasta la fecha se desconoce el paradero de sus restos

Publicación: 17/07/2024 10:07
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El golpe de Estado de García Mesa con apoyo de la dictadura Argentina.

Pasaron 44 años desde aquella madrugada del 17 de julio de 1980, en la que comenzó la etapa más cruda en la historia de la democracia del país. Ese amanecer trajo consigo el rugir de los tanques de guerra y eco del marchar de las botas militares, en las céntricas calles de kilómetro cero paceño.

Bajo el comando del general Luis García Mesa y su mano derecha Luis Arce Gómez, un grupo de militares con estrechos vínculos al narcotráfico ejecutó un sangriento golpe de Estado, con el objetivo de derrocar el gobierno de Lydia Gueiler Tejada, la primera mujer en ocupar la presidencia de Bolivia.

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García Mesa impuso una dictadura que duró dos largos años y contó con el respaldo activo de la dictadura militar argentina, en ese entonces liderada por el general Jorge Rafael Videla, quien autorizó al Batallón 601 de Inteligencia enviar a un centenar de hombres hacia La Paz.

Mientras tanto en Argentina

Tres semanas antes del golpe en el país, desde Argentina el periodista brasileño Newton Carlos denunció en el diario Zero Hora que había contactos entre la dictadura argentina y García Meza (a la sazón, jefe del Ejército de Bolivia), con el ofrecimiento de $us 200 millones para afrontar una previsible sanción de Estados Unidos. Más tarde, The New York Times estimó que la cifra fue de $us 250 millones, a cuenta de la compra de gas boliviano.

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En el hecho más notorio de ese 17 de julio, fue la desaparición del líder de la izquierda Marcelo Quiroga Santa Cruz. A punta de balas, los golpistas asaltaron la Central Obrera Boliviana (COB), se lo llevaron y nunca más se lo volvió a ver, hasta la fecha se desconoce el paradero de sus restos.

Marcelo Quiroga Santa Cruz y la masacre en la calle Harrington

El dirigente socialista estaba exiliado en la Argentina a comienzos de los 70, tras el golpe de Hugo Banzer contra Juan José Torres. A su vez, Torres fue asesinado en Buenos Aires en junio de 1976.

Se estima que alrededor de 500 asesinatos y desapariciones forzadas, además de 4.000 detenciones ocurrieron en esa etapa oscura de la democracia.

El punto álgido de la represión llegó el 15 de enero de 1981 con la masacre de la calle Harrington, en La Paz, donde ocho líderes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) fueron brutalmente asesinados. Gloria Ardaya, única sobreviviente, se convertiría en testimonio vivo del horror.

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El régimen de García Meza, manchado por la corrupción y sus vínculos con el narcotráfico, pronto se vio aislado internacionalmente.

La caída

El 4 de agosto de 1981 se obligó a García Meza a renunciar a la presidencia. Por fin, uno de los capítulos más oscuros de la historia del país, finalizaba. En 1993 Juan del Granado (exalcalde de La Paz) impulsó y ganó el juicio de responsabilidades a la dictadura de Luis García Meza.

La caída del militar abrió el paso para la recuperación de la democracia. A 44 años de esos hechos fatídicos, en los que robaron la vida de varios demócratas y corrió mucha sangre, los bolivianos recuerdan como un hecho que sentó precedente en la historia boliviana.