Puding aún espera a su familia, pero todos fallecieron en el desastre aéreo en Corea del Sur

Entre las víctimas del accidente aéreo se encontraba toda la familia de Pudding, su querido dueño que pronto cumpliría 80 años y ocho miembros de su familia, incluida su esposa, su hija y su nieta de seis años

Publicación: 07/01/2025 06:00
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[@NaverNews] / Puding el perrito que perdió a toda su familia en el desastre aéreo en Corea del Sur

La fidelidad de los perros es un acto de amor puro hacia los humanos, tal es el caso de Puding, el perrito que –al estilo de Hachiko— aún espera la llegada de su familia que pereció en el accidente aéreo en Muan, Corea del Sur.

Después de la tragedia, sin ningún cuidador, Pudding deambulaba entre la casa familiar y el centro del pueblo, observando los vehículos y autobuses que pasaban como si buscara a sus seres queridos. Los aldeanos, preocupados y conmovidos por su pérdida, comenzaron a alimentarlo, pero él no dejaba de buscar.

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Esta noticia fue difundida la organización Care que reconstruyó la triste historia de Pudding, luego fue reportada por el Korea Times.

Según la fuente, mascota vivía en una aldea en el condado de Yeonggwang, provincia de Jeolla del Sur, acompañaba a su dueño quien fue víctima del mayor accidente en el vuelo Bangkok-Muan de Jeju Air el 29 de diciembre.

Puding aún espera a su familia
Puding aún espera a su familia

Hace un par de semanas, el avión, un Boeing 737-800, aterrizó boca abajo en la pista, no lejos del pueblo, antes de chocar a gran velocidad contra un muro de hormigón al final de la pista y desintegrarse, matando a 179 personas, todas ellas los ocupantes excepto una azafata y un mayordomo.

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Entre las víctimas se encontraba toda la familia de Pudding, su querido dueño que pronto cumpliría 80 años y ocho miembros de su familia, incluida su esposa, su hija y su nieta de seis años. Toda la familia con la que podía contar el perrito quedó prácticamente exterminada, regresando de unas vacaciones en Tailandia.

En su cuenta oficial de redes sociales que citó Clarín, la organización Care escribió: “Determinamos que no era seguro para Pudding deambular por el pueblo sin un cuidador. Después de contactar a la afligida familia en el funeral, decidimos cuidarlo hasta que encuentre un tutor adecuado”.

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Los voluntarios de la organización lo encontraron “sentado tranquilamente frente al ayuntamiento del pueblo. Cuando nos acercamos, corrió hacia nosotros emocionado, como si todavía estuviera esperando a su familia”.