El factor más alarmante de la inflación es el monetario, advierten economistas
La inflación en Bolivia se disparó a un 5,21% en junio de 2025, marcando el mayor aumento mensual de precios en casi dos décadas, situación que golpea principalmente a familias de bajos recursos


Ante el nuevo informe de inflación del Instituto Nacional de Estadística (INE), el economista Christian Aramayo advirtió que la tasa inflacionaria se disparó un 43% entre mayo y junio, una escalada sin precedentes en casi dos décadas y que pone en manifiesto la problemática monetaria.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación mensual del 5,21% en junio de 2025, la cifra más alta desde que hay registros digitales del Estado y, según la lectura de Aramayo, la aceleración golpea con más fuerza a las familias de bajos ingresos.
Asimismo, el reporte del INE confirma que la inflación acumulada entre enero y junio de 2025 llegó al 15,53%, duplicando la meta oficial del Gobierno, que proyectaba una inflación anual de 7,5%.
“La inflación es un crimen moral, porque atenta ante las familias más pobres y vulnerables de Bolivia”, dijo el economistas al resaltar que el fenómeno actual tiene raíces monetarias y que la rapidez del aumento refleja una pérdida preocupante del valor del boliviano. “De mayo a junio, la inflación ha subido un 43%. Y esto es muy fuerte”, subrayó
Por su parte, el analista Gonzalo Chávez también apuntó al origen monetario de la inflación, contemplando que el Gobierno ha intensificado la expansión monetaria para cubrir su creciente gasto público. Esta política, en un contexto de escasa oferta, ha alimentado la presión sobre los precios, según el reporte.
Chávez alertó también sobre los riesgos de una “inercia inflacionaria”, provocada por mecanismos de indexación como las UFVs y bonos ligados al oro, lo que implica que la inflación pasada se transmite directamente a la futura, dificultando su contención.
“Estamos entrando en una espiral de aceleración inflacionaria. Cada vez la tasa de inflación va a esperarse que vaya incrementándose más, porque las familias necesitan cubrir con mayor cantidad de bolivianos lo que antes cubrían con un monto específico”, dijo Aramayo.
En mercados populares de La Paz, los efectos ya se sienten con fuerza. Comerciantes de la calle Incachaca reportan que el kilo de carne de cerdo se vende entre Bs 32 y 33. “Posiblemente no baje porque tampoco hay mucho chancho y tampoco hay venta”, señaló una vendedora.
Otros productos básicos como la papa, cebolla y haba muestran incrementos sostenidos desde enero, según el reporte.