“Un mal año para el comercio exterior”: IBCE refleja “un bajón de casi 3.000 millones de dólares” al tercer trimestre de 2024
El Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) asegura que si no hay un golpe de timón en las políticas públicas no habrá mejoras para 2025. Las exportaciones tuvieron un “dramático descenso” de más de $us 1.600 millones.
El Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) presentó un balance de gestión en el que señala que 2024 fue un mal año para el comercio exterior boliviano, y que una mejora para 2025 dependerá de un golpe de timón en las políticas públicas para equilibrar la economía del país.
“El comercio exterior de Bolivia experimentó un bajón de casi 3.000 millones de dólares al tercer trimestre. Las exportaciones cayeron 1.643 millones de dólares mientras que las importaciones bajaron 1.337 millones, con lo cual, Bolivia va camino a registrar un segundo déficit comercial consecutivo en la gestión 2024”, indicó el gerente del IBCE, Gary Rodríguez.
Rodríguez explicó que si el país quiere una Bolivia digna y soberana, la respuesta es producir más, exportar más y sustituir algunas importaciones.
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Apuntó a que el Gobierno debe dar al sector privado seguridad jurídica, seguridad de mercado y seguridad de políticas públicas, para producir más y que esto lleve a una generación de divisas que permita alinear la economía boliviana, con las inversiones y generación de empleo.
“El sector privado le pide tres cosas al Gobierno: seguridad jurídica para la inversión, que no hayan avasallamientos, ni bloqueos. Seguridad de mercado, que no haya frenos, ni restricciones y que haya aliento a las exportaciones, y seguridad de buenas políticas públicas, con visión y responsabilidades compartidas”, afirmó Rodríguez.
Para el IBCE, la baja de las exportaciones implica que se dispondrá de menos divisas para los pagos externos; mientras que el derrumbe de las importaciones derivará en una menor actividad económica y comercial del país.
“Lo que se necesita es un golpe de timón en políticas públicas, planteamos el punto de quiebre, que el sector público y privado debemos trabajar armoniosamente, desprendiéndonos de intereses, solo así podremos salir adelante”, culminó diciendo el gerente Rodríguez.
