¿Quién fue Ozzy Osbourne, reconocido como el padre del heavy metal?
El ‘Príncipe de las Tinieblas’ fundó en 1968 la banda Black Sabbath y estuvo a la vanguardia de la escena del heavy metal, una rama más profunda y oscura del rock duro, de la que se lo considera pionero
El 5 de julio, el mítico rockero inglés Ozzy Osbourne y su grupo Black Sabbath hicieron su última interpretación de “Paranoid”, su mayor éxito y se despidieron de los escenarios en un concierto en su Birmingham natal que rindió culto al heavy metal.
Este martes, la familia de Osbourne comunico el fallecimiento de la leyenda a sus 76 años. El ‘Príncipe de las Tinieblas’ sufría desde hace varios años la enfermedad de Parkinson y estuvo por años alejado de los escenarios.
Como líder de Black Sabbath, que fundó en 1968, Osbourne estuvo a la vanguardia de la escena del heavy metal, una rama más profunda y oscura del rock duro, de la que se lo considera pionero.
Entre sus actuaciones más memorables se incluye la vez que le arrancó la cabeza a un murciélago de un mordisco, y era famoso también por su imagen tenebrosa, con larga melena negra y gafas oscuras.
Nacido como John Michael Osbourne el 3 de diciembre de 1948 en Aston, en Birmingham, dejó la escuela a los 15 años y realizó trabajos esporádicos, antes de juntarse con su amigo del colegio, Geezer Butler, en varias bandas.
El cantante, que vivió en Estados Unidos, se hizo muy popular además como protagonista de un ‘reality show’ con su familia, ‘The Osbournes’, en el que documentaron su vida doméstica de 2002 a 2005.
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HISTÓRICA DESPEDIDA
Hacía 20 años que Black Sabbath, pionero del heavy metal, no se reunía en su formación original de 1968 (Osbourne como cantante, Tony Iommi en la guitarra, Geezer Butler en el bajo y Bill Ward en la batería).
Hace un poco más de 2 semanas, el cantante, que escribió su leyenda al morder la cabeza de un murciélago en pleno concierto, cantó en su despedida sentado, prisionero de sus temblores, en un trono satánico confeccionado para el padrino del heavy metal.
“I love you (los amo)”, gritó con su voz todavía rechinante el carismático cantante a la entregada multitud en el estadio Villa Park, donde se rodeó de grandes estrellas del género, en el estadio Villa Park de Birmingham en Inglaterra.
Fue un adiós crudo y emotivo, acompañado de sus compañeros de Black Sabbath y de decenas de miles de seguidores del metal llegados del todo el mundo hasta el estadio del Aston Villa, convertido por una noche en una catedral pagana.
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