Joven madre vendedora de frutas fue apuñalada por otra comerciante porque le compraban más
Rubiana Romero gastó todos sus ahorros y empeñó hasta su cama para tratar de cubrir los gastos médicos. Tiene una hija y pide ayuda para recuperarse
Postrada en su colchón en el piso, adolorida y sin poder trabajar, así se encuentra Rubiana Romero, una joven madre que se dedica a vender frutas, tras ser apuñalada por una comerciante enfurecida porque las personas le compraban más. La víctima está preocupada porque tiene una hija, ha gastado todos sus ahorros y puso en prenda lo que le costó ganar para pagar a la clínica.
Rubiana está desconsolada. Todo el tiempo está pensando cómo recuperar todo lo que dejó en prenda y que le costó mucho esfuerzo. Además, tampoco puede generar recursos para alimentar a su pequeña, todo por el ataque del que fue víctima el sábado.
El sábado parecía una jornada más con mucho trabajo. Llegó hasta la feria de Barrio Lindo empujando su carrito, que estaba cargado de frutas, pues tenía la esperanza de buenas ventas. El dinero que iba a ganar lo iba a meter a su alcancía para regalarle algo a su hija.
Sin embargo, todo cambió cuando otra comerciante de frutas se le abalanzó. Estaba con un cuchillo en la mano que terminó clavándoselo en su abdomen. Rubiana sorprendida por el ataque, no se dio cuenta de la grave lesión que tenía, hasta que la gente comenzó a gritar porque estaba perdiendo sangre.
Llamaron a una ambulancia que nunca llegó, motivo por el que fue subida a un taxi y por la emergencia decidieron llevarla a una clínica. Esa rápida reacción fue clave para que ahora Rubiana se encuentre con vida; sin embargo, ahora debe mucho dinero y ni si quiera puede comprarse los medicamentos para su tratamiento.
Rubiana explica que en la clínica le cobraron cerca de 10.000 bolivianos, dinero que no tenía por lo que tuvo que prestarse y poner en prenda todas sus pertenencias, incluida su cama.
“La agresora está suelta y no ayudó en nada”, dice Rubiana.
La pareja de Rubiana trabaja, le ayuda. Entre ambos tienen una niña; sin embargo, aún necesita dinero para su tratamiento y quiere recuperar todo lo que dejó en prenda.
Las personas que quieran ayudar a Rubiana pueden comunicarse con ella comunicándose al 754-19529
