Boliviano de Oro: Los artesanos de la miniatura, gestores que construyen los sueños de miles de personas en la Alasita
Los artesanos de la fiesta de la miniatura van trabajando día y noche para sorprender a los bolivianos con sus novedades.
Este 24 de enero se celebra la Alasita, o también llamada, la ‘fiesta de la miniatura’. Los actores principales también son los artesanos que hábilmente van construyendo los sueños de las personas.
Además, este grupo lucha por mantener viva la Alasita, declarada como patrimonio por la Unesco en 2017.
“Todo lo que las personas esperan obtener, puede ser una casa o un auto, realmente se consigue, pero con fe”, dijo el artesano David Titirico.
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La habilidad para fabricar casas, autos y otros elementos viene desde hace décadas. El oficio de los artesanos implica dedicación, esmero y responsabilidad para entregar el trabajo final.
“A los 18 o 19 años he comenzado a hacer mis primeras obras de casas que son pequeñas. Es un orgullo para mí que sean un patrimonio, porque lo hacemos con nuestras manos propias”, declaró el artesano Fernando Gonzáles.
Con el pasar de los años, los artesanos fueron adquiriendo su estilo propio e inclusive cuentan que algunas personas les pidieron realizar trabajos exclusivos.
“Como un arquitecto tienes que saber el tamaño, la distancia, pues yo me enfoco en la fachada. Las personas quieren cholet, chalet, minimalistas, transformers, hay una variedad”, dijo el artesano Orlando Coaquira.
Los artesanos cuentan que cuando el trabajo está terminado, ellos también esperan que la obra se cumpla y se haga realidad.
“Los sueños se cumplen cuando lo hacemos con fe, lo ch’allamos, ya sea un terrenito, una casa, un auto”, dijo la artesana María Mancilla.
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La fiesta de la Alasita tiene al Ekeko como figura, data aproximadamente de 1781, más de dos siglos después, es el artesano que trabaja sin descanso para mantener esta tradición boliviana.
Por su habilidad, dedicación, esmero y construir sueños, los artesanos de la miniatura son Boliviano de Oro.