“No somos loteadores”: Familias afectadas por el derrumbe del talud en La Paz urgen ayuda y se quejan por el corte de agua
La Alcaldía de La Paz los notificó para el desalojo y ya se habla de un plan de demolición de los predios que para este municipio son ilegales. Los afectados argumentan que tienen los documentos en orden, pero en el municipio vecino de Palca
Un día después del derrumbe del talud que dejó al menos tres predios afectados en el barrio Achumani, en el sur de La Paz, una de las familias afectadas pide ayuda a las autoridades porque no tiene dónde ir, pasaron la noche en la calle.
La Alcaldía de La Paz los notificó con la orden de desalojo y ya se habla de un plan de demolición de los predios que, para este municipio, son ilegales.
Sin embargo, los vecinos de este sector de Achumani aseguran que tienen los documentos en orden, pero en el municipio vecino de Palca.
La familia que fue la más afectada por el “desmoronamiento” de 40 toneladas de tierra y piedras está afligida porque se ha quedado sin techo.
Pero no es todo. También se quedó sin agua debido a que la operadora cortó el suministro en ese sector. La única buena noticia que recibieron es la favorable evolución de la salud de sus hijas, que resultaron heridas en el derrumbe.
“Lamentablemente hemos tenido que pasar la noche a la intemperie con mi esposa, ya mis bebés están, gracias a Dios, fuera de peligro, ya les dieron de alta”, señaló el hombre.
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En ese marco, rechazó las denuncias en su contra. “Comentaron algunos funcionarios de la Alcaldía que habríamos avasallado el terreno, que seríamos loteadores, cosa que no es así”, dijo.
Otra mujer que vive en el lugar reivindicó la legalidad de su terreno. “Mis papás han adquirido el terreno hace 65 años de las ‘madres concepcionistas’, nunca hemos sido ni avasalladores ni loteadores, hemos nacido acá”, sostuvo con la voz quebrada.
La Alcaldía de La Paz asegura que las construcciones son ilegales. Por eso han precintado el lugar para evitar que sus moradores retornen a los predios, aseguran que hay riesgo.
“No tenemos agua, estamos sin haber tomado té, gracias a los vecinos que nos conocen, nos ha podido prestar frazadas nos han traído en termo agua y té y vamos a estar hasta que nos habiliten el agua”, relató el hombre. “Es bien delicada esta situación”, señaló.
