“Todo eso es injusto”, una nueva versión da un giro al escándalo de la ‘Kiss Cam’ del concierto de Coldplay
El video del Kiss Cam, durante el concierto de la banda de Chris Martin, se viralizó en todas las redes sociales y tuvo consecuencias inimaginables en la vida de los dos protagonistas


El escándalo por la ‘Kiss cam’ del concierto de Coldplay en julio pasado, en el que se vio en una posición comprometedora a Andy Byron, entonces CEO de Astronomer, junto a Kristin Cabot, exdirectora de personal de la misma compañía, ambos casados con personas diferentes, dio la vuelta al mundo y generó una ola de debates sobre la fidelidad, la privacidad y la ética.
Sin embargo, una nueva versión de los hechos de una persona muy cercana a ambos, que fue entrevistada en exclusiva por la revista People que publicó la nota el pasado 21 de septiembre, señala que las cosas pudieron ser malinterpretadas y que tanto Andy como Kristin vivieron una “injusticia”.
El video del ‘Kiss Cam’ durante el concierto de la banda de Chris Martin se viralizó en todas las redes sociales y tuvo consecuencias inimaginables en la vida de los dos protagonistas.
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“Kristin y Andy tenían una gran relación profesional y eran buenos amigos. Nunca existió romance alguno”, aseguró el allegado a la exempleada de la firma a la revista People, que no fue identificado por temas de privacidad.
Según este nuevo testimonio, lo que se vio en las imágenes no fue un momento de infidelidad, sino solo un gesto desafortunado, una imagen sacada en un mal momento que fue tergiversada y descontextualizada.
“No fue correcto abrazar a tu jefe en un concierto, y ella lo reconoce”, aseveró el nuevo testigo, pero afirmó que el video tuvo consecuencias demasiado extremas. “El escándalo, la pérdida del empleo... todo eso es injusto”, agregó.
“Es imposible dimensionar lo que ocurrió y lo devastador que resultó, no solo para las personas implicadas, sino para sus familias”, dijo.
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La fuente señalo que la difusión del video caló hondo no solo en la vida de los dos involucrados, sino en el de sus familias, que se vieron desbordadas de comentarios, comentarios de odio, amenazas y una afectación enorme a su vida en todos los ámbitos.
El testigo señaló que la noche del 16 de julio tanto Andy como Kristin acudieron al concierto en el Gillette Stadium de Foxboro, Massachusetts, en calidad de amigos y que no había ningún carácter corporativo.
Incluso Kristin y su pareja Andrew Cabot ya estaban en un mal momento y en planes de separación. Esa noche Cabot estaba en el mismo concierto con otra persona.
“La gente disfruta del escarnio público como si fuera un castigo legítimo por un error”, afirmó la fuente.
“Ese momento, que se volvió viral al instante, no refleja la historia real”, afirmó la fuente y aseguró que no había ninguna relación sentimental: “Kristin y Andy tenían una excelente relación laboral, una gran amistad. No hubo ningún romance”.
Sin embargo, admitió que no es la forma correcta de tratar a una colega de trabajo, aunque insistió en que las consecuencias fueron totalmente desproporcionadas.