Alerta por desbordes: Hace cuatro años no se realizan obras en los ríos de zonas productivas, según la Cappo
Los cultivos de soya en el norte de Santa Cruz son los más susceptibles a las riadas, según el reporte que se da mientras rige una alerta por posibles desbordes en la cuenca de al menos seis ríos
El vicepresidente de la Cámara Agropecuaria de Pequeños Productores del Oriente (Cappo), Demetrio Pérez, señaló que existe intranquilidad entre los actores del sector debido a los posibles desbordes de ríos en las zonas productivas, donde hace al menos cuatro años no se han realizado obras de inversión para proteger los cultivos.
“Habíamos hecho unas gestiones de inversión hasta la fase 5. Hace más de cuatro años no se ha hecho inversión en los ríos Piraí y Grande, que son los ríos que nos amenazan permanentemente al sector productivo que estamos en la zona” del Norte integrado cruceño, señaló el ejecutivo.
Según el reporte, los cultivos de soya en el norte de Santa Cruz son los más susceptibles a las riadas, situación que asoma mientras rige una alerta naranja del Servicio Nacional de Meteorología y Hidrología (Senamhi) por posibles desbordes en la cuenca de al menos seis ríos del departamento cruceño: Piraí, Yapacaní, Ichilo, Grande, San Julián y Parapetí.
Pérez expuso que este escenario implica una amenaza para los cultivos de soya de la zona en caso de rebalse, los cuales son los más susceptibles y que están en pleno desarrollo, mientras que en los pronósticos del tiempo aparecen lluvias.
“Si es que hay una lluvia intensa, como lo están anunciando, es muy probable que tengamos pérdida en la parte de las riberas del río y otros. Inclusive comunidades enteras pueden estar amenazadas por las inundaciones. Al río no se le ha hecho el trabajo de reencauzamiento, hay lugares que tienen mucha debilidad y pueden salirse de su cauce el agua”, resaltó.
A principios de diciembre, desde el Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi), el director Luis Aguilera manifestó que los estudios reflejan que los 14 municipios del Norte Integrado tienen tendencia a sufrir inundaciones, porque los bosques que cuidan las áreas adyacentes al río y protegen comunidades están con un avasallamiento de deforestación en torno de 50-60%.
En ese entonces, Aguilera recordó que enviaron una carta al Gobierno pidiendo que, junto a los municipios y la Gobernación, cada uno con su contraparte, se puedan ejecutar proyectos para evitar inundaciones; sin embargo, esto no se concretó.
“El río es un ser vivo y permanentemente hay que hacer trabajos, muchos trabajos de ingeniería, pero hasta ahora no se han hecho por falta de recursos; por falta de gestiones, inclusive, de los propios gobiernos municipales que años anteriores se hacía de manera conjunta”, agregó por su parte el dirigente de la Cappo.