Trigo y maíz entran en la agenda del análisis de biotecnología, granos en los que hay déficit en Bolivia
En un contexto de baja producción, el presidente de Anapo sostuvo que ya se presentó la propuesta y se espera la apertura para que nuevas semillas se puedan aprobar lo más pronto posible
El presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Fernando Romero, señaló que en las recientes reuniones con autoridades de Gobierno se acordó que en una mesa técnica inicien las labores para el uso de biotecnología en cultivos de trigo y maíz, granos en los que existe un déficit de producción en territorio nacional.
Respecto al maíz, el dirigente manifestó que se acordó establecer la mesa específica para trabajar en una propuesta de zonificación en la producción del grano, de coexistencia con la actual producción del maíz y articulando una política de recuperación de los maíces nativos.
Por su parte, la ministra de la Presidencia, Marìa Nela Prada, explicó que Bolivia es una fuente de diversidad de maíz y por eso es fundamental precautelar la producción que ya se da en el país para que no se pierda ninguna variedad, coincidiendo en que se prevé regionalizar en áreas donde no se dan los granos nativos.
“Somos deficitarios y, por lo tanto, importamos maíz para todo lo que viene a ser la cadena productiva de alimentación y por eso es importante mejorar los rendimientos en nuestra producción de maíz”, expuso la ministra en conferencia de prensa.
En esta línea, el presidente de Anapo precisó que estos maìces se contemplan para las mesas de las familias bolivianas, pero se apunta también a llevar el nuevo grano hacia la producción industrial de alimento balanceado o, incluso, biocombustibles.
“Es la propuesta, esperamos la apertura de las autoridades para que se apruebe lo más rápido posible porque realmente en el maíz se puede implementar de forma inmediata, tendremos esa oferta disponible o excedente como un beneficio para poder exportar y que se convierta en divisas que son muy necesarias para la economía”, remarcó el ejecutivo.
Mientras que la situación del trigo refleja la propuesta del evento HB4 resistente a la sequía y Romero exteriorizó que esto va a ser fundamental para apuntalar la productividad con miras a que los precios se mantengan estables.
Según el reporte, ya se tienen la aprobación para empezar a hacer evaluaciones en trigo, labor que se puede extender por dos campañas agrícolas, siendo un escenario óptimo la campaña de invierno 2025 o la del 2026, en el peor de los casos con miras a convertir estos granos en pan para el país.
“A mayor productividad pues mayor oferta y si la demanda es menor o mayor vas a tener una fluctuación en los precios y esto se ve mucho en el tema del trigo y en el tema del maíz en la cual somos deficitarios en la producción de ambos cultivos”, sostuvo el dirigente.
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