“Estamos como bomberos evitando protestas”, dice Evo tras determinación del TSE de no supervisar congreso del MAS
El ente electoral rechazó supervisar el congreso del partido azul que fue convocado por el ala evista para el 3 de septiembre y Evo dijo que hay sectores que enfilan protestas, por lo que responsabilizó al Gobierno
El máximo dirigente del Movimiento Al Socialismo (MAS-IPSP), Juan Evo Morales, señaló que las bases del partido quieren asumir protestas ante la determinación del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de no supervisar el congreso que fue convocado por el ala evista para el 3 de septiembre en el que se prevé renovar la directiva partidaria.
Y es que el viernes pasado, se conoció que la sala plena del TSE ha decidido rechazar la solicitud de supervisión a ese congreso, según manifestó Tahuichi Tahuichi, vocal del ente electoral, al advertir que el masismo “no está cumpliendo con su propio estatuto orgánico”.
El artículo 13 del estatuto masista establece Congreso Nacional Ordinario será convocado públicamente por la Dirección Nacional del MAS-IPSP de acuerdo a temario, “previo consenso con las organizaciones matrices nacionales”.
“Las bases quieren asumir medidas de presión ante tanta injusticia y violación de las normas legales. Nosotros estamos como bomberos evitando que se asuman protestas, sin embargo, si nuestra militancia dispone medidas de presión, será responsabilidad del Gobierno y el sometimiento del TSE a la Casa Grande del Pueblo”, sostuvo Morales.
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A decir del jefe masista, el TSE rechazó supervisar el congreso que se prevé llevar adelante en Villa Tunari advirtiendo que la determinación de la entidad estatal se da de manera ilegal y solo por intereses políticos.
Más temprano, Morales también refirió que el presidente Luis Arce sabe que no tiene ninguna posibilidad electoral y es por eso que rechazó propuestas como la realización de un congreso de unidad del partido azul, así como ir a elecciones primarias cerradas o abiertas.
Según el dirigente del partido azul, el plan del Gobierno es inhabilitarlo como candidato presidencial y proscribir o intentar quedarse con la sigla del MAS-IPSP, al igual que sostener alianzas con sectores a los que califica como “la derecha”.
