ENCUENTRAS LAS MEJORES OFERTAS

No murió por el humo, señala el Sedes sobre el bebé que fue trasladado de emergencia desde la Chiquitania

El jueves, Ignacia Supepí, cacique de la comunidad Río Blanco, en el municipio de Concepción, Santa Cruz, denunció que un bebé de un año murió con signos de intoxicación por humo

Publicación: 27/09/2024 11:01
$output.data
$output.data
[Foto referencial] / La muerte se registró el jueves de esta semana

El director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Jaime Bilbao, indicó este viernes que el niño que fue trasladado de emergencia desde la Chiquitania a la capital cruceña, murió por un shock séptico y una gastroenteritis aguda; con lo que descartó que se haya tratado de complicaciones de salud por el humo generado por incendios forestales.

El jueves, la cacique de la comunidad Río Blanco, Ignacia Supepí, denunció el deceso de este bebé, de un año de edad, y señaló que presentó síntomas de intoxicación por humo. La autoridad comunal aseguró que el niño presentaba fiebre, tos, diarrea y vómitos.

MIRA AQUÍ: En lo que va del año, 18 personas han muerto por dengue en Cochabamba, seis son niños

Este viernes, Bilbao aclaró que, según el informe, el niño tenía fiebre, vómito y diarrea desde hace tres días después de que consumió una torta. Agregó que los padres informaron que ante la fiebre, le dieron aspirina al bebé, pese a que es un medicamento no apto para menores de edad.

“De acuerdo al informe del forense, el niño fallece por un shock séptico, tenía una infección generalizada en el cuerpo, una gastroenteritis aguda; es decir, durante varios días tuvo vómito y diarrea y estaba totalmente deshidratado. Esto nos hace descartar completamente que la causa de la muerte fue el humo”, explicó en conferencia de prensa.

MIRA AQUÍ: Paro médico exige atención del municipio de Santa Cruz de la Sierra y solo se atendieron emergencias

Bilbao remarcó a los padres de familia evitar automedicar a los niños en caso de fiebre y por el contrario llevarlo a un centro de salud. Recomendó a los padres de familia que eviten que los niños estén en espacios abiertos o, caso contrario, que ocupen barbijo.