Familia de víctima de feminicidio en Mizque pide que se amplíe la investigación a la expareja del acusado
Los familiares de la mujer de 38 años de edad llegaron hasta el IDIF para reclamar sus restos. Aseguran que convivía con el presunto autor hace más de un año
Este fin de semana, se conoció sobre el feminicidio de una mujer de 38 años de edad, la cual aparentemente murió en manos de su pareja quien además la enterró en un domicilio en el municipio de Mizque, Cochabamba.
La víctima fue identificada como Silvia Andrade y sus familiares se hicieron presentes esta jornada en instalaciones del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) para reclamar sus restos.
En el lugar, la familia pidió que la investigación del caso se amplíe a la expareja del acusado, ya que aseguran que ella tenía pleno conocimiento del hecho y esperó varios días para recién alertar a la Policía.
De acuerdo a la información, la mujer mantenía una convivencia con el presunto autor del hecho desde hace un año y medio, aproximadamente.
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Sus allegados afirman que ellos desconocían que la pareja se había ido a vivir a una comunidad alejada de la población, ya que hace dos meses habían perdido el contacto con ella, y que incluso había cortado su línea telefónica.
Sin embargo, los familiares dicen que Silvia era víctima de violencia intrafamiliar, ya que el sujeto constantemente la golpeaba.
Aún se aguarda conocer los resultados de la autopsia que determine las causas exactas del deceso de la mujer de 38 años.
Asimismo, se conoce que el hijo de la víctima de 21 años llegará en las próximas horas hasta el país, ya que se encontraba trabajando en Chile.
Sobre el caso
Según el informe preliminar de la Policía, el hecho ocurrió el pasado 31 de marzo, donde la pareja habría sostenido una discusión en su domicilio, y de acuerdo con la versión del principal sospechoso, de 48 años, durante el altercado empujó a la mujer, quien tropezó y al caer se golpeó la nuca lo que provocó su muerte de forma instantánea.
En lugar de reportar el hecho a la Policía, el hombre decidió cavar una fosa a unos 50 metros de la construcción de su casa y luego enterró el cuerpo de la víctima.
Días después, acudió a la casa de su expareja, a quien le confesó lo sucedido y le pidió ayuda. Sin embargo, la mujer, temiendo verse involucrada en el caso, esperó hasta este 6 de abril para presentarse ante las autoridades y denunciar el crimen.
